Compostaje y Vermicompostaje
Reduce los desperdicios de cocina, ten un abono maravilloso, fácil y siempre a mano, mantén un jardín súper bonito. Puedes tenerlo todo con un abono en casa, con técnicas de compostaje y vermicompostaje. Hay varios tipos de compostadores, pero los recomendables son los que tienen lombrices que hacen el trabajo “sucio”. Son ideales para el manejo de desechos orgánicos, como restos de comida, papel, cartón, madera, etc. Veamos cada una de las dos técnicas.
Compostaje
En tu jardín, haz un agujero de 1 metro cuadrado por 30 centímetros de profundidad. Si prefieres puedes colocar tablas para asegurar las paredes de tierra, aunque no creo que sea necesario. En mi caso se mantuvo sin problemas.
En este agujero, coloca el material orgánico, y vas llenando a medida que tengas más desechos en tu casa. Recuerda, deben ser desechos orgánicos, nada de plástico o metales.
La forma de llenarlo debe ser por partes, concentra tu esfuerzo en completar el nivel por sectores, comenzando por las esquinas. Los desechos no debes compactarlos, se necesita oxígeno y espacio entre el material para que se realice el proceso de descomposición.
Debes cubrir el material con hojas secas o aserrín, esto te ayuda a controlar el mal olor que pueda generarse por el proceso. Riega de vez en cuando si hace mucho calor o mucho sol, ya que la mezcla puede calentarse y secarse. Es bueno mantenerse húmedo para que la descomposición ocurra más rápidamente.
Cada 15 días aproximadamente, voltea todo el material, para ayudar a airear y facilitar la descomposición. Poco a poco, todo este material se convertirá en una tierra muy oscura, con olor a tierra húmeda. Este fertilizante es maravilloso para las plantas y tu jardín.
Vermicompostaje
Tal y como nos dicen nuestros amigos de la lombrizroja.com, uno de los sistemas de compostaje doméstico más famosos en la actualidad es el compost con lombrices de tierra. Esto se debe a que es pequeño, no huele mal, cabe en casi cualquier rincón, y la descomposición ocurre más rápido con la ayuda de estos animalitos. Este tipo de compostador es ideal para quienes viven en departamentos o quienes viven en casa y no pueden hacer un agujero en el patio, como en el método explicado anteriormente. Hay contenedores prefabricados que vienen con lombrices de tierra, pero puedes hacer los tuyos usando cajas o cubos de plástico. Un compost con lombrices necesita un mínimo de tres pisos:
- El piso superior, donde se depositan los desechos orgánicos y se cubre con material seco como aserrín y hojas secas que, una vez llenado, debe estar en reposo durante aproximadamente un mes.
- Durante este tiempo de descanso, el piso intermedio gira hacia arriba y comienza el ciclo nuevamente. Estos dos pisos son donde se composta el material.
- El piso de abajo es el que recoge el líquido que gotea, los pisos están intercalados con agujeros para que caiga el líquido y se muevan las lombrices.
Al final de estos dos meses, el llamado período de descanso, el material sobrante es un humus que parece tierra, muy nutritivo para las plantas y con olor a tierra húmeda. Nada de esto desprende mal olor si todo se hace correctamente. El exceso de humedad puede facilitar la creación de moscas, por eso es importante cubrir todo muy bien con aserrín. Además de las lombrices de tierra, aparecen otros animales pequeños, como hormigas y otros insectos, que también ayudan en el proceso de descomposición de los alimentos. Todo está limpio y, siguiendo todos los pasos, no hay riesgo de contaminación.
